Los principales objetivos de la inyección de los tendones son evitar la corrosión del acero de pretensado y proporcionar una adherencia eficaz entre el hormigón y el acero.
Para conseguirlo es condición básica que todos los huecos de las vainas o conductos y anclajes queden llenos por un material de inyección adecuado (apartado 37.4), que posea los requisitos de resistencia y adherencia necesarios.
La inyección debe efectuarse lo más pronto posible después del tesado. Si, por razones constructivas, debiera diferirse, se efectuará una protección provisional de las armaduras, utilizando algún método o material que no impida la ulterior adherencia de los tendones al producto de inyección.
Además, para asegurar que la inyección de los tendones se realiza de forma correcta y segura es preciso disponer de:
–Personal cualificado, entrenado al efecto.
–Un equipo sólido y seguro, adecuadamente revisado, calibrado y puesto a punto.
–Unas instrucciones escritas y una organización previa sobre los materiales a utilizar y el procedimiento de inyección a seguir.
–Adoptar las precauciones de seguridad adecuadas a cada caso.
37.4.2 Productos de inyección adherentes
37.4.2.1 Materiales componentes
37.4.2.2 Requisitos de los productos de inyección